Texto y fotos: Miguel Casas (GUÍA MIGUELÍN)
Sobre lo que fue la antigua taberna, Casa Ricardo, en 2013 Valentín Botarges y su socio Alberto Valero, dos profesionales con mucha experiencia en el mundo de la gastronomía, han creado un confortable y bonito restaurante.
Su fachada está pintada en tonos Burdeos y blanco, con una amplia barra también en blanco y un comedor, donde se han mantenido un zócalo de azulejos perimetral y en donde sigue primando el color blanco, en sus paredes, techo y mobiliario.
Valentín empezó con su hermano, en su Lérida natal, en 1966. Su restaurante La Huerta de Lleida alcanzó mucha fama y con este nombre se trasladó a Madrid en 1999, concretamente a la Cuesta de Santo Domingo, donde estuvo hasta el 2012, que por un problema de ruina en la finca, lo tuvieron que dejar.
Alberto es miembro de una familia, dedicada a los arroces en caldero, La Calderoteca de la calle Huertas en Madrid, ambos han puesto se experiencia al servicio de sus cliente.
Su cocina es catalana, de gran pureza, donde priman los productos de la huerta, en temporada.
Para empezar: en temporada los ricos calçots, que son los cebollinos a la brasa y servidos en una teja, los cargols a la llauna (caracoles a la llama), esqueixada (ensalada de bacalao en salazón), escalibada (ensalada de pimientos y berenjenas a la plancha), surtido de embutidos pirenaicos, setas en temporada y caracoles y callos a la madrileña, como tiene que ser.
Destacan, también los arroces, se preparan mínimo para dos personas y pueden ser: de bacalao con setas y vegetales, meloso, con atún y gamba roja, seyoret (señorito) con todo pelao y rossejat (fideúa con fideos finos).
De pescados: rape a la marinera con alcachofas y almejas, merluza de pincho a la plancha, romana o ahumada al horno de carbón de encina y el bacalao, que lo prepara de distintas formas: con tomate natural, al horno con carbón de encina, a la leridana, con setas y en xanfaina.
De carnes: destacan las monchetas con longaniza, conejo a la parrilla con ali oli, chuletillas de cordero, codornices a la brasa, el confit de pato con manzanas, flambeadas al Calvados y sus ricas carnes de ternera.
Y para terminar un postre casero: crema catalana, higos a la crema, crèpé con manzanas flambeadas al brandy, mel i mató (requesón con miel) y los sorbetes de cava.
La bodega es buena, dispone de una variada oferta de vinos catalanes del Segre, Priorat, Penedés, Alella, Somontano, de La Rioja, Ribera del Duero y una gran variedad de cavas.
Precio medio 30 €.
Cierra domingos y días festivos, en la noche.
Avenida Ciudad de Barcelona, 5 - Madrid
Teléfono 914337525